¡Buenos días, tardes o noches, mis festivos generales!
Y feliz año nuevo de parte de los Abades de Maisontaal; que la fortaleza de vuestra espada sea tan firme como las murallas de Altdorf y, vuestros corazones, tan valientes como el de un Caballero del Reino. Os deseamos un 2025 lleno de victorias en vuestras batallas, felicidad en vuestra vida y mucho plástico (o plomo) sobre vuestra mesa.
Arrancamos la primera semana de este nuevo año con un pellizco de nervios en el estómago, ese que solo se siente cuando se acerca una gran batalla... O, mejor dicho, ¡un torneo! Torrejón de Ardoz dará hogar al primero de muchos torneos de TuliStudio, y pronto espero traeros una reseña con mi experiencia. En esta ocasión acudimos con mis valientes corsarios y con los conocidos enanos de Tono. Los tileanos todavía se encuentran en chapa y pintura, así que tendremos que esperar a su entrada triunfal.
Mientras la espera nos carcome, ¿cómo os habéis portado este año? Espero que tan bien como para que los Reyes Magos os dejen un regalo bajo el árbol. Si no, no os preocupéis que este año tenemos a nuestro propio Rey de Oriente: Ainu, con sus temibles mercenarios de Arabia y un trasfondo que hará las delicias de los paladares más exquisitos.
Creedme cuando os digo que la presentación era digna de estar en el banquete de cualquier sultán pero, como os he comentado en trasfondos anteriores, hemos sido incapaces de traerla a vuestras pantallas. Ya tenemos solución, gracias a Hektor por sugerirla en los comentarios, pero todavía no la hemos aplicado. Pensamos que es más «justo» que todos los trasfondos de la IV Maisontaal tengan el mismo formato (o falta de) al presentarlos, y sinceramente, son tan buenos que no les hace falta ninguna clase de «sazón».
En las vastas y peligrosas tierras de Warhammer, entre los desiertos de Arabia y
los Reinos Fronterizos, una historia de alianzas inesperadas, música y manjares se
forjó bajo la sombra de las estrellas. Esta es la crónica del matón ogro Gorath, su
fiel camarada Camogrón, y una banda de halflings liderados por Walid e Iago que
cambiarían para siempre el destino de sus pueblos. Aquí comienza la leyenda de los
seis bocados de la Hermandad de "Al Manjar".
Bocado 1. El Viaje de Gorath y la Fe de las Fauces
Gorath, el temido caudillo ogro, marchaba con su ejército desde los Reinos
Fronterizos hacia los desiertos de Arabia, con la única misión de realizar su
peregrinación por el mundo y su matarife, Bolkarr el Carnicero, de hacer honor a
las fauces allá a donde fuesen. A su lado, un pequeño grupo de leales seguidores,
entre ellos su más curioso compañero, un ogro viajero que había recorrido tierras
lejanas, incluido el exótico desierto de Arabia. Este ogro se hace llamar Camogrón
de la panza y tiene por inusual afición a tocar una gran guitarra de madera y metal
que podía usarse tanto como instrumento como arma a dos manos.
Guiados por el deseo de la riqueza enterrada en las tierras desérticas Nehekhara,
Gorath fijó su mirada en una pirámide antigua de algún príncipe o rey funerario que
importaba eso. Pero lo que debía ser un saqueo fácil se transformó en una
catástrofe. El ejército de Gorath fue diezmado, muriendo incluso hasta el matarife
Bolkar y sólo un puñado de ogros, incluidos Camogrón, lograron huir. La frustración
de Gorath era palpable mientras huía de la pirámide sólo recordaba las últimas
palabras de la boca ensangrentada del matarife… HONRA A LAS FAUCES… Sabía
que la única manera de sobrevivir era adaptarse a la nueva situación, sin ejército,
sin apenas comida ni energías.
Bocado 2. El Encuentro con los Halflings
Tras deambular algunos días y habiéndose comido al único camello que les quedaban
parecían que iban a perecer en las dunas, pero gracias al estupendo olfato que tienen
los ogros cuando tienen hambre sintieron un leve olor a comida, como un camello
huele a kilómetros el agua. El delicioso olor se hacía cada vez más intenso y a lo
lejos vieron un oasis y un campamento con fuego encendido.
En el oasis, Gorath y sus sobrevivientes encontraron algo inesperado: una caravana
de halflings, pequeños humanoides tan rechonchos como ellos de los que habían oído
historias por sus habilidades con el arco y su especial talento en la cocina.
Inicialmente, Gorath pensó en atacar por sorpresa, pero la batalla y las dunas habían
mermado sus energías y la de sus ogros. Decidió, en cambio, negociar al más puro
estilo ogro exigiendo una condición intimidando, al contrario.
Bocado 3. El Duelo: Walid contra Gorath
Las negociaciones no fueron fáciles, ya que los halflings no querían deshacerse de sus
mercancías y mucho menos su comida, pero los ogros les intimidaban mucho a pesar
de las malas condiciones que mostraban.
Finalmente, se acordó resolver sus diferencias a través de desafíos. Gorath retó al
cabecilla halfling, llamado Walid de Naanzaret, a un combate individual. Para sorpresa
de los ogros, el pequeño halfling aceptó haciendo dibujar una sonrisa perversa en la
cara de Gorath. Ya verás quién ríe último pensó Walid.
Al golpe de Camogron en su cubrepanzas Gorath bramó y cargó contra Walid
mientras que este dió vueltas a su honda y soltó la piedra en dirección al matón
ogro. La piedra le alcanzó justo en el entrecejo a Gorath haciendo que se cayera de
boca. Al incorporarse entre tambaleos Walid ya tenía lista la segunda piedra dando
vueltas en la honda, pero quedó atónito con la reacción del matón, lejos de
enfurecerse, soltó una carcajada, apreciando la destreza de su adversario.
Bocado 4. El Duelo Musical: Camogrón vs Iago de Cecina
El segundo desafío fue mucho más peculiar. Walid, sabiendo que su compañero Iago
de Cecina era un maestro del laúd y viendo la guitarra de Camogrón, retó al grupo
de ogros a un duelo musical ya que había oído que los ogros no eran buenos en las
artes en general. Gorath, sorprendido, pero sonriendo, miró a Camogrón, quien le
faltó tiempo para ajustar su enorme guitarra artesanal que al empezar a tocar
resonaba con la fuerza de las montañas. Sorprendido pero seguro de sí mismo Iago
se apresuró a no perder el duelo, afinó rápidamente su laúd y empezó a tocar.
El duelo comenzó, y lo que parecía ser una simple competición musical pronto se
convirtió en un espectáculo. La guitarra de Camogrón emitía notas profundas y
poderosas, mientras que el laúd de Iago respondía con agilidad y precisión. La música
envolvió el oasis, rompiendo toda la tensión entre los halflings y ogros, que se
reunieron alrededor del fuego para disfrutar del espectáculo dejando espadas y arcos
a un lado.
Fue entonces cuando el cocinero halfling Donarin Kebalim ofreció de su olla caliente
la cena lista tanto a ogros como a halflings y así nació una amistad inesperada. Al
final, el duelo musical no tuvo un claro ganador. Lo que sí dejó en claro fue la
profunda conexión entre ambas razas, unidas por la música y la comida.
Bocado 5. La Canción de “Al Manjar” y la Hermandad
Con el tiempo, esa amistad se transformó en algo más profundo. Iago de Cecina y
Camogrón crearon juntos una canción, una nuba que capturaba la esencia de la
nueva alianza entre ogros y halflings. La canción fue llamada "Al Manjar", un
homenaje a su amor compartido entre haflings y ogros por la comida y la música.
Sus notas evocaban imágenes de festines interminables, de carnes asadas al fuego y
mesas llenas de manjares exquisitos.
Al escuchar esta nuba por primera vez, Gorath comprendió que estaba honrando
verdaderamente a las Fauces como le dijo Bolkar a través de esa amistad, del festín
y del goce compartido. Poco a poco, más viajeros, mercenarios y comerciantes se
unieron a su causa, atraídos por la seguridad que ofrecían los ogros y el ambiente
festivo de sus noches.
Bocado final. El Ejército de “Al Manjar”
La caravana, que comenzó como un grupo pequeño, creció hasta convertirse en un
verdadero ejército mercenario multirracial. Ogros, halflings y árabes forman ahora
una fuerza formidable, unida no solo por la promesa de oro, sino por la música, la
comida, y la camaradería. A cada ciudad que llegan, su presencia es temida y
respetada, no sólo por su fuerza en la batalla, sino también por las legendarias
fiestas que organizan en las noches bajo las estrellas.
Y así, con la nuba de "Al Manjar" resonando en el aire, Gorath y su ejército de
mercenarios viajan por el Viejo Mundo, dejando su huella en cada rincón. Porque al
final, en Warhammer, no solo la guerra crea las leyendas; a veces, las más grandes
historias nacen alrededor de un banquete compartido y una canción bien tocada
Felices Reyes!!!! 👑 y felices fiestas, tambien
ResponderEliminarHa sido una delicia de trasfondo, jijiji ☺️ mucha suerte en Madrid <333
¡Felices fiestas para ti también, guapetona! Y muchas gracias por la suerte y los ánimos, eres un sol.
EliminarMuchas gracias Megupi! Me alegra saber que has disfrutado del banquete!
ResponderEliminarImpresionante la calidad de los relatos que subis 🤩 Ainu es genial, como el genio de Aladino
ResponderEliminar¡Gracias, Hektor! Espero que Miguel Ángel se pase por aquí para leer unas palabras tan amables.
EliminarEy Hektor!! Muchas gracias!! Siempre intento que la lista de mi ejército vaya acorde a un trasfondo. Por eso en ese torneo lleve a los ogros, los halflings y la olla caliente fueron unas risas jugarlos, igual que escribir el trasfondo.
EliminarUn trasfondo maravilloso escrito por una persona maravillosa, ¡muchas gracias por compartir tu creatividad con nosotros! <3
ResponderEliminarMi querida abadesa superiora! Muchas gracias como siempre por todo el apoyo que me dais tu y el abad Asur! <3
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